Usted está aquí

Coque Malla, valiente caballero

Coque Malla salió al Teatro Leal con sombrero y arropado bajo la tenue luz que murmuraba un ' O mio babbino caro' que sabiamente eligió como banda sonora para empezar el espectáculo y preparar su llegada. De perlas para comenzar a desgranar un repertorio lleno de los grandes momentos que el artista ha ido cultivando durante estos años.

Un espectáculo para aproximadamente media entrada en el Leal y que reunía para la ocasión a fans, curiosos y nostálgicos. Para estos últimos no hubo revival de Los Ronaldos aunque se lo pidieron. "Los temas de Los Ronaldos con Los Ronaldos", con estas palabras zanjó rápidamente el asunto.

Se bastó y sobró, sólo con la guitarra acústica, para demostrar valientemente que temas como 'La carta', 'No puedo vivir sin ti', 'Berlín', 'Mi asesina', 'Hasta el final', 'Puede ser' o 'Una moneda', entre otras, y que en su nuevo disco comparte con diferentes féminas y banda al completo, suenan igual de bien desnudas y sin acompañamiento alguno. Claro que Coque es mucho Coque y su rabiosa actitud de estrella del escenario salva cualquier obstáculo. De hecho no echaba de menos a los miembros del grupo porque actuaba como si allí estuvieran. Invocando a su guitarrista para que se hiciera un solo e incluso presentándolos al público. Un cachondo, divertido, ameno y comunicativo que nos cautivó haciéndonos sentir como de la pandilla. Una apasionada y alcohólica revisión de 'Hace Tiempo', o una curiosa adaptación sin piano de 'She understands' en la que fue capaz no sin cierta coña de imitar a Bob Dylan son buen ejemplo del ratito bueno que pasamos.

Mención aparte su estrella invitada para la ocasión. Tengan en cuenta que este nuevo disco está lleno de artistas de renombre que no pueden acompañarlo en su gira, por lo que para cada show tiene una invitada del lugar para hacer de partener en un par de temas. La maravillosa voz de Leiko Krahe fue la encargada de acompañar al artista en dos grandes canciones 'Termonuclear' y 'Lo intenta'. Por supuesto de lo mejor del espectáculo que acabó con un solicitadísimo bis de dos temas y brindis al público mientras sonaba 'Mack the knife' y el maestro se despedía como un gentleman.

7 de junio de 2013, Teatro Leal (La Laguna)

Crónica de José J. Martín (Conache)