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nacho almenar

"Me interesa la historia, lo que quiero contar y que parezca real"

La compañía Burka Teatro estrena 'Capa' en el Teatro Leal. Por este motivo, hemos hablado con Nacho Almenar, director y escritor de la obra, para que nos avance algunas cuestiones de la representación y de su protagonista, el fotorreportero Robert Capa.

Lagenda.- Burka cumple en 2018 15 años sobre los escenarios. ¿Tiene este estreno un tinte de celebración?
Nacho Almenar.- Todo lo que vayamos a estrenar este año tiene tinte de celebración, 15 años no se cumplen todos los días y estamos muy contentos de poder seguir trabajando. Este año vamos a estrenar ‘Capa’ y ‘TheRoomToBe’, que está dirigida y escrita por mi compañera Aranza Coello.

L.-¿Cuánto tiempo llevas madurando este espectáculo y cuál es la motivación para elegir el personaje de Robert Capa?
N.A.- Empecé a investigar sobre el personaje de Robert Capa hace 7 u 8 años, incluso escribí algo en ese tiempo, pero lo tuve que dejar aparcado porque debíamos enfrentar otros proyectos.

Fue a raíz de una exposición que me encontré hace unos años en el Reina Sofía. Me pareció muy curioso el personaje. Parecía salido de una película de Hollywood. Endre Friedmann y Gerda Taro, utilizando el recurso de inventarse un personaje ficticio para vender más caras sus fotografías. Todo eso pasa además en un espacio de tiempo que a mí me interesa mucho, que es la guerra civil española y la Segunda Guerra Mundial. Ellos fueron los que contaron con imágenes lo que pasó y aún no tenemos acceso a muchas de ellas. En 2005 se encontró lo que se ha llamado ‘La maleta mexicana’, donde hay un montón de negativos inéditos de Robert Capa, Gerda Taro y Chim que arrojan luz al horror de la guerra civil española y que se están empezando a ver ahora.

Hemos vestido a los personajes por dentro, no por fuera

L.- ¿La obra refleja la figura del reportero de guerra o es una excusa para la historia del personaje?
N.A.- Las dos cosas. Yo creo que los reporteros de guerra nos han dado las imágenes de lo que realmente sucede. Si miramos, por ejemplo, las pinturas sobre las guerras napoleónicas de Jacques Louis David vemos que son idílicas y románticas. En la fotografía, la crudeza de la imagen real no da pie a la poesía. Nos interesa este discurso que nos presenta el fotorreportero. No lo que nos gustaría que fuera, sino lo que es. Pero también nos interesa el individuo y lo que piensa mientras dispara con su cámara, sus miedos y fobias. Los fotorreporteros nos han puesto las imágenes más desgarradoras en periódicos y revistas junto a nuestro desayuno.

L.- ¿Cómo de contento has quedado con el resultado? ¿Cambiarías algo a estas alturas del cuento o en posteriores representaciones?
N.A.- Me hubiese encantado tener más días de ensayo, para que el elenco pudiera disfrutar más de la búsqueda y asegurar también algunas cuestiones técnicas. Pero esto es así. Ningún actor, director o autor se queda contento con el trabajo y parece que éste nunca está terminado. Es una sensación rara. Como director, he trabajado con autores ya fallecidos que obviamente no cuestionan tu visión, pero cuando los tienes cerca es otra cosa. A mí me ha pasado en 'Capa' que tengo una visión como autor y como director otra que no es exactamente coincidente.

L.- ¿Cuál es la complejidad para llevarlo a escena?
N.A.- Sería más faćil contarlo utilizando el lenguaje del cine que el del teatro. Sólo somos 6 actores en escena y la historia abarca desde 1928 hasta 1948, muchos personajes…, pero lo que me interesa contar lo podemos resolver entre los que estamos y eso es muy gratificante y divertido. Como director intento hacer un teatro que se entienda con pocos elementos.

Como director intento hacer un teatro que se entienda con pocos elementos

L.- ¿Cómo de biográfica es la historia?¿Se reivindica también la figura de Gerda Taro?
N.A.- La obra presenta a Endre Friedmann y a Gerda Tardo. El fenómeno de Robert Capa surge por una cuestión meramente económica y para esconder el hecho de ser judíos, por eso cambiaron sus nombres originales: Endre Ernő Friedmann y Gerta Pohorylle. Pero rápidamente, Gerda Taro se reivindica con su propio nombre, no como Capa. Al principio no se tenía en cuenta que las fotografías fueran de uno u otra. Eran simplemente dos o tres colegas que sacaban fotos y las publicaban como Robert Capa para ganar más dinero. Pero tras la muerte de Gerda, con tan sólo 27 años en el 37 en la guerra civil española, Endre Friedmann como Capa continúa hasta el final de sus días realizando fotografías en China, España, la Segunda Guerra Mundial, el éxodo de Israel, Hollywood, Rusia…, hasta que muere en el 54 al pisar una mina en Vietnam. Así que sí, el componente biográfico está.



L.- En comparación con el cine, ¿hay más libertad en el teatro para definir estereotipos y elegir elencos adecuados?
N.A.- Yo creo que eso es una cuestión de necesidad. En el cine lo que se haría es buscar un perfil más cercano a la realidad, que está en el imaginario popular. El actor que interpreta a Capa en esta obra, César Yanes, mide casi dos metros. Capa no era tan alto. Pero yo lo he elegido porque es un excelente actor. Burka siempre ha intentado mantener un equipo estable de trabajo y nos pareció que como actor podía dar el personaje sin problemas. Me interesa la historia, lo que quiero contar y que parezca real.

L.- Una cita de Capa reza: "Si tu fotografía no es lo suficientemente buena es porque no estabas lo suficientemente cerca". ¿Se aplica esta cercanía o intimismo al mundo del teatro?
N.A.- De momento la frase está en la obra, pero también la duda de si los hechos son interesantes o es el punto de vista sobre los hechos lo importante, ya que en la fotografía tiene que haber evocación. Con respecto a la cercanía y comunión entre público y actor, nos parece fundamental y nos aplicamos a ello cada vez que presentamos un trabajo.

L.- ¿Cómo se aborda el interpretar diferentes personajes? ¿Cómo empatiza cada actor con cada uno de ellos?
N.A.- Cada maestrillo tiene su librillo. Yo les he dejado bastante libertad en ese sentido. Es delicado porque cuando hablas de gente que es muy reconocida, como Ingrid Bergman, Ted Allan, Irwin Shaw o el propio Capa, o afinas muchísimo en la caracterización o quizás es mejor desafinar. A mí no me interesa la sonrisa de Ingrid Bergman o de Capa; me interesa el porqué sonríen, lo que tienen dentro. Por eso no nos hemos preocupado tanto por el vestuario y cuestiones exteriores más allá de adecuarlos lo más posible a la época. Digamos que hemos vestido a los personajes por dentro, no por fuera.

L.- ¿Cómo compatibilizas tu faceta de actor con la de director?¿Eres duro contigo?
N.A.-Yo me prodigo poco como actor porque soy muy vago, pero como director soy muy exigente con lo que busco. A veces lo logro y otras no.

L.- Teniendo en cuenta la cronología que abarca esta representación y la importancía de la fotografía analógica, ¿es 'Capa' una obra con fecha de caducidad?
N.A.- Eso nunca se sabe. Yo creo que no, aunque hemos cambiado cosas de la obra porque la tecnología digital acabó con la era analógica igual que “el vídeo acabó con la estrella de la radio”. En un momento de la obra, Cartier-Bresson le está dando una clase a Gerda Taro y le recomienda que “no hay que excederse con las tomas porque entre una foto y otra quizás estaba la foto que andas buscando”. La era digital ha resuelto este problema y no tiene demasiado sentido hablar de él, no sé si afortunada o desafortunadamente. Incluso las cámaras de fotos están siendo sustituidas por los móviles. Hablamos del momento de la fotografía en el que aparecen las cámaras que permiten realizar 24 exposiciones sin tener que cambiar el carrete. Pero eso que apenas hace 80 años era una revolución ahora es historia.

L.- Además de esta próxima fecha, ¿tienen pensado moverla por las islas, o fuera de ellas?
N.A.- Esperamos girar en 2019 por el archipiélago y fuera de él. De momento para 2018, aparte del estreno en el Teatro Leal, tenemos cerradas una actuación en Tacoronte y otra en Los Realejos. Las fechas se pueden ver en nuestra página web.

L.- La popularidad del personaje… ¿podría permitir que se pueda exportar a otros lugares fuera del ámbito hispanohablante?
N.A.- No lo sé, tampoco sé si es tan popular, tengo dudas con respecto a eso. Si la pieza queda bien y cuenta lo que queremos contar, creo que es lo suficientemente interesante como para que pueda girar en países de lengua castellana y otros. Pero poco a poco.